Todo lo que resulta adecuado para excitar las ideas de dolor y peligro, es decir, todo lo que es de algún modo terrible, o se relaciona con objetos terribles, o actúa de manera análoga al terror, es una fuente de lo sublime; esto es, produce la emoción más fuerte que la mente es capaz de sentir.
La trazada fuerte, los rasguños difumines a trazo abierto y la posible apreciación humana dentro de la obra, hacen que de cierta forma se genere terror, dolor, incertidumbre, un sentimiento apreciable mas no tangible, "un terror placentero".
La idea principal era que se centrase en la mujer, su llanto y su lamento, que se notara la fuerza de trazado, la desimetría del marco, ahogando la imagen dentro del ortogonalismo de su pared exterior.